ES EL ESCENARIO IDEAL PARA ECHAR A VOLAR LA IMAGINACIÓN. LA MÚSICA ALTIPLÁNICA O EL SILENCIO SON BUENOS ALIADOS PARA DISFRUTAR CON MIRADA PANÓPTICA, UN PARAJE NATURAL DE CHILE QUE INVITA A REPENSAR SOBRE EL EXTREMO PAISAJÍSTICO DE LA TIERRA QUE HABITAMOS.
Por: Erick Bellido Y.
San Pedro de Atacama, es por excelencia el destino preferido de los turistas que visitan Chile, junto con Isla de Pascua, Las Torres del Paine, el Valle del Elqui y Viña del Mar. Un panorama imperdible, es internarse sólo 17 kilómetros al interior de la famosa Cordillera de la Sal, para descubrir todo el magnetismo teletransportador del Valle de la Luna.
Por estos días es uno de los destinos top de Chile. Por eso no es extraño escuchar hablar en más de 12 idiomas a la vez. Parece territorio de migrantes. Todos unidos fajo una sola premisa: dejarse cautivar con parajes que no tienen nada que envidiar a la superficie lunar.
Dependiendo la hora que marque el reloj, serán las gradientes de tonalidades que su retina podrá captar al recorrer el Valle de la Luna.
Si bien el periodo estival atrae miles de visitas hasta el Valle de la Luna, los guías turísticos, hacen hincapié a los visitantes en preservar el lugar tal cual como lo encontraron. Y la conciencia ecológica prevalece y se respeta, por ello nadie queda indiferente a registrar con sus cámaras las geomorfología que sirve de estudio hasta para rodar películas como la nueva trilogía de la Guerra de las Galaxias.
Tal como lo hicieran atacameños y naturalistas, resulta singularmente recogedor explorar senderos, valles y bloques de piedra serpenteadas insertas por miles a lo largo y ancho de todo el Valle de la Luna.
Las rocas toman formas, matices y gradientes propios. Ayudados por el sol y la sombra, las formas que se pueden apreciar no dejarán indiferentes a las mentes imaginativas. Aquí por ejemplo, los restos de las vértebras de un dinosaurio fosilizado escondido bajo toneladas de arena. Bueno, eso imaginé yo!
Minerales de sal y arena cristalizada encontrarán por cantidades. Incluso, es factible ver mica y cuarzo incrustados en la piedra. Lo importante aquí es mirar y preservar el patrimonio paisajístico, evitando su deterioro o sustracción de minerales, para que todos aquellos que visitan la zona, tengan la posibilidad de maravillarse con la escenografía natural que ofrece el Valle de la Luna, distante de San Pedro de Atacama a solo minutos.
De estos rincones tipo laberintos y con diversas salidas alternativas hay por montones. Lo importante es tener cuidado con la cabeza o pisar en falso sobre rocas de sal semi arcillosas, las cuales tienden a desprenderse con relativa facilidad.
Si el calor no es lo suyo, y sólo busca recrear su retina al paso, nutrido de alimentos, bebestibles y aire acondicionado, y todo desde la comodidad del sillón de su auto, no se aprobleme, porque los caminos se encuentran en óptimas condiciones para desarrollar un tour sin contratiempos.
Se debe tener cuidado con la mantención de los vehículos particulares antes de iniciar una aventura por medio del desierto chileno, pues los abastecimientos de agua y gasolina se encuentran a distancias significativas. Pero los turistas son solidarios, y pueden correr la buena suerte de ser auxiliados antes de morir calcinados por el agobiante calor.
Es muy común, observar la presencia de exploradores en bicicletas, motos, caballos, autos, buses e incluso caminando. Es que la exótica belleza de estos rincones del desierto de Atacama invita a innovar en las formas de recorrer cada rincón.
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